On our journey to discover Yucatan, we learned that there is a place very close to the port of Celestún known as El Palmar. Precious stories are always heard from this place, since its beaches and settings are almost virgin. What we did not know is that to get there you have to travel a dirt road for two to four hours (depending on the vehicle) on trails that can only fit one car, surrounded by spiky plants, swamps, not very firm sand and no phone coverage. This trip is ideal to get away from what we call civilization and  reflect on some relevant topic. Looking at the road for hours forces you to free your mind and feel the environment around you. The trip was worth it, because it is one of the most beautiful and impressive settings I have ever seen, as well as reflecting on   important issues. Upon returning to Celestún, we thanked life for everything we have.

 En nuestro viaje por descubrir Yucatán nos enteramos de que existe un lugar muy cerca del puerto de Celestún conocido como El Palmar, de este lugar siempre se escuchan preciosas historias, ya que sus playas y escenarios son casi vírgenes. Lo que no sabíamos es que para llegar él se tiene que recorrer un camino de   terracería de dos a cuatro horas (dependiendo del vehículo) en senderos en los que solo cabe un automóvil, rodeados de plantas puntiagudas, ciénegas, arena no muy firme y sin cobertura para teléfonos. Este viaje es ideal para alejarse de lo que llamamos civilización y reflexionar sobre algún tema relevante. El estar mirando el camino durante horas te obliga a liberar la mente y sentir el ambiente que te rodea. El viaje valió la pena, porque es uno de los escenarios más hermosos e impresionantes que he visto, además de que reflexionamos sobre temas importantes. Al regresar a Celestún agradecimos a la vida por todo lo que tenemos. 

 Artist from México